Esta placa recuerda al camarada Matías Montero en donde cayó abatido por las balas socialistas en la calle Juan Alvarez de Mendizábal o por lo menos el año pasado aún estaba allí. Probablemente porque los creadores de la Ley de Memória Histórica a tan sólo unos metros de allí, en la Calle Ferraz desconozcan quien era.
Los moradores de la calle Ferraz decretan y subvencionan a los muertos de primera, pero Matías para ellos era un muerto de segunda. Un nuevo Honor para nosotros. Un nuevo Honor que nuestros muertos sean de segunda para tan inaceptable Ley. Nuestros muertos son de segunda para ellos, pero concretamente Matías Montero era un camarada de primera. De Primera Línea. De Primera hora. Fundador del SEU, pero para ellos era un muerto de segunda que no tiene cabida en esa maldita Ley. Es normal. Le mataron ELLOS.Lo mató el PSOE, concretamente un militante de las Juventudes Socialistas, por el grave delito de ir vendiendo prensa Nacional Sindicalista. Venía de gritar de la Puerta del Sol:"Ha salido FE"....y por ello le mataron los descendientes de los moradores de la Calle Ferraz de hoy. Así actuaban en la genocida II República. Ahora actúan asesinando a la Memoria con Leyes desmemoriadas. No olvidemos que el asesinato fue en 1934 mucho antes de la Guerra Civil, en la cual se escudan para defender sus crímenes, como legítima defensa. Pues no. No fue en la Guerra. Fue dos años antes y fue a manos de los defensores a ultranza de la maldita Ley de Memoria Histórica.
Hoy, ya medio cerrado el Valle ante nuestro silencio cobarde y cerrada definitivamente la Memoria de los nuestros y perseguidos como viles asesinos quienes fueron héroes y en muchos casos mártires, llega otro homenaje y recuerdo a quien fue camarada limpio y honesto y se le segó la vida por defender al obrero y por vender prensa Nacional y Sindicalista. Solo por eso. Asesinato que está en nuestra Memoria, la verdadera Memoria Histórica.
Entre las ropas del cadáver de Matías, se escondía un artículo titulado "Las flechas de Isabel y Fernando", que había escrito para la revista "FE". En él trazaba las líneas para conseguir una "Universidad limpia de pasiones, bloque compacto de profesores y estudiantes, que marche entusiasta en pos de la cultura al servicio de la Patria".
A día de hoy, ni siquiera la mitad de los españoles, conocen la historia del 'Yugo y las Flechas', del 'Águila de San Juan' y no digamos, la de Matías Montero
Al día siguiente, el 10 de febrero de 1934, el cuerpo de Matías Montero recibió sepultura cristiana, en donde José Antonio Primo de Rivera, ante la tumba abierta de Matías, pronunciaría estas breves palabras:
«Aquí tenemos, ya en tierra, a uno de nuestros mejores camaradas. Nos da la lección magnífica de su silencio. Otros, cómodamente, nos aconsejarían desde sus casas ser más animosos, más combativos, más duros en las represalias. Es muy fácil aconsejar. Pero Matías Montero no aconsejó ni habló: se limitó a salir a la calle a cumplir con su deber, aun sabiendo que probablemente en la calle le aguardaba la muerte. Lo sabía porque se lo tenían anunciado. Poco antes de morir dijo: "Sé que estoy amenazado de muerte, pero no me importa si es para bien de España y de su causa". No pasó mucho tiempo sin que una bala le diera cabalmente en el corazón, donde se acrisolaba su amor a España y su amor a la Falange»
Aquella época, insisto antes de la Guerra, pasaba lo que dice el título de un libro escrito por Cristóbal Córdoba que se presenta el próximo miércoles, 9 de febrero en la Sala Azul /Espacio Ronda en la Ronda de Segovia 50 (Metro Puerta de Toledo) : "De cada cuatro cayeron tres".....y todavía se permiten el lujo de hablarnos de Memoria.
Matías Montero y Rodríguez de Trujillo: ¡¡PRESENTE!!
Matías Montero, ¡Presente!.
ResponderEliminar¡PRESENTE en nuestro afán!
ResponderEliminar¡Presente!
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