Es fácil, muy fácil decir barbaridades, criminalizar a los fachas, y meterse con lo que pensamos, con nuestros símbolos, con nuestros héroes y con nuestra historia.
Es fácil hacerlo ahora, porque se basan en un sistema que protege sus mentiras, las da cobertura, y las eleva a la categoría de verdades absolutas. El sistema pretende echar por tierra una ideología que sabe cargada de valores, y a la que debe bombardear acusándola de todo tipo de disparates, dirigiendo acciones encaminadas a que nuestra manera de pensar, pierda adeptos, futuros seguidores y consiguiendo que casi defenderla en público, en la calle, en nuestros trabajos o centros de estudio, sea casi un acto heroico por la desaprobación que genera.
Esa cuelga del Sambenito, ha demonizado hasta tal extremo nuestra ideología, que incluso nos ha hecho dividirnos entre nosotros a causa de haber optado por distintas estrategias que pudieran engañar a nuestra sociedad disimulando nuestro pasado o dando una imagen beatífica, que nos haga apartarnos del concepto “facha con cuernos” que se han empeñado en atribuirnos.
No es criticable esa actitud, casi todos más o menos, en distintas etapas de nuestra vida política hemos optado por eso, a fin de conseguir suavizar el concepto negativo que irradiamos. Eso ha hecho que renunciemos a muchos de nuestros símbolos, que hayamos optado por el “lisismo” en nuestras banderas, o por una permanente autojustificación “barbaridades hubo en los dos bandos”, “ Los de Eta son unos Fascistas” etc. Es decir hemos aceptado implícitamente el papel que tenemos de “malos oficiales”, adoptando incluso su propio lenguaje, e intentamos de manera disimulada seguir siendo nosotros, pero sin darnos cuenta de que en ese afán de mimetizarnos con lo políticamente correcto, acabamos perdiendo la esencia de lo que fuimos, y … acabamos, de hecho no sabiendo ni lo que somos.
Ellos en cambio han sabido mantener su esencia no renunciando a nada. Lo mismo cantan una internacional en un congreso del PSOE, que nos acusan de cantar el “cara al sol”. Lo mismo quitan una calle de una víctima del marxismo que le ponen otras a personajes como Pablo Iglesias, la Pasionaria, o Manuel Azaña. Lo mismo quitan estatuas de Franco y José Antonio, que se las ponen a Indalecio Prieto, a Largo Caballero y hasta al Che Guevara.
Pretenden Cargarse el Valle de los caídos, donde hay enterrados muertos de los dos bandos y sin embargo recientemente, hace unos días inauguran un monumento a los asesinos Stalinistas de las Brigadas Internacionales, en plena Universidad Complutense de Madrid.
Es decir ensalzan la represión marxista, y critican a los ultras por represores.
No renuncian a su simbología e ideas criminales, y sin embargo nos obligan a escondernos como si tuviésemos que avergonzarnos de las nuestras.
Estos intolerantes de lo políticamente correcto, no quieren que Franco esté en el Valle, porque no conciben que 36 años después de su muerte muchísima gente siga queriendo mostrar su respeto a su obra y a su memoria. Del mismo modo que han desenterrado el cadáver de Rudolf Hess, para evitar que su tumba sea un centro de peregrinación. Han echado al mar el cadáver de Bin Laden, o han enterrado en el desierto y en un lugar desconocido al propio Gadaffi, mientras mantienen públicamente la tumba de Lenin.
No les basta con su comportamiento en vida, sino que además ni muertos dejan parar a aquellos que no pensaron como ellos. Los políticamente correctos, son unos auténticos Talibanes de la intolerancia y de la mentira.
Son tan profesionales de la mentira, que se han especializado en cambiar la historia, para que nadie pueda recordar sus masacres, y los hechos que marcaron sus trayectorias.
Nosotros desde el MYL, intentaremos daros argumentos para que nunca más un patriota se avergüence de lo que es, y que tengamos armas dialécticas con las que defender la auténtica historia de lo que ocurrió. Sintiéndonos verdaderamente herederos de aquellos que nos precedieron en la lucha, que vivieron y pelearon como caballeros, con dignidad, con temor de Dios, con ética y con valor.
Reivindicando esas etapas de nuestra historia de las que nos sentimos orgullosos y desmontando sus falacias, el próximo día 24 de Noviembre realizaremos un programa de radio monográfico sobre el Valle de los Caídos. Que puede sorprender a muchos, incluso de nosotros, porque desconocemos muchas cosas; porque nada es como lo han pintado.
En el próximo programa os daremos argumentos para que podáis estar muy orgullosos del Valle de los Caídos y de su Santa Cruz.
Saludos Romanos.
José Pedro Cruz
Tienes toda la razón,en todo menos en una cosa,ningún PATRIOTA,se averguenza de su pasado, ni de su historia ni de sus simbolos.Yo,por lo menos no.
ResponderEliminarEstoy orgulloso de ser ESPAÑOL,CATOLICO Y FASCISTA.
!!! ARRIBA ESPAÑA !!!
Este valle debe ser para siempre el recuerdo de lo que nunca debe volver a ocurrir, y no como quieren PP con su abstencion y PSOE, Podemos y Ciudadanos con su voto favorable, que sea la excusa para resucitar a Franco.
ResponderEliminarHoy, Franco está mas vivo que nunca y con el panorama que tenemos, dicho sea de paso, se le echa de menos.