No será pronto ni tarde.
Con impotencia y rabia contenida. Decepcionado y abatido a partes iguales, y culpándome porque no, en primera persona de nuestra circunstancia y crisis electoral.
“CENTRADOS EN TI”, martillea constante en mi subconsciente el slogan estrella del PP para los próximos comicios municipales.
Por que para ganar con mayoría suficiente, queridos lectores, hay que “centrarse”.
Y no nos estamos refiriendo a aquellos maravillosos centros que tanto prodigaban los eternos Puskas, Di Stefano, Gento….
No queridos lectores.Centremonos. Y el que se mueva o se escore, no sale en la foto.
Llego a Madrid después de un largo fin de semana de estancia en mi querida Guadarrama, pueblo donde apenas si resisten vestigios y calles con los nombres de los héroes de la Cruzada.
Pueblo donde después de un trabajo serio y concienzudo, conseguimos un centenar de militantes de la extinta ALIANZA PARA LA UNIDAD NACIONAL (A.U.N.), capaces de poner “boca abajo” toda la sierra norte madrileña de nuestros lemas y propaganda combativa y revolucionaria. Pueblo desde el que no hace mucho tiempo, encendimos la llama de la ilusión y la esperanza.
Cuanto trabajo dilapidado!
Pero como digo, me encuentro abatido, decepcionado y muy “descentrado”.
Paseando por sus calles, y en plena campaña electoral, me encuentro de bruces con el puesto de campaña del PP. Todos muy centrados.
Pero lo que me corta la respiración , y me hiela la sangre y me “descentra” es el encontrarme entre sus filas, con la camiseta del partido y repartiendo su publicidad, a 2 de los que fueron los líderes de aquella corta pero romántica aventura del A.U.N. en Guadarrama
Nietos de divisionarios, me reconocen y cruzan la calle a mi encuentro sin dudarlo. Que duda cabe que compartimos muchas horas de camaradería, esfuerzo e ilusión.
Les saludo entre convulso , confundido y muy “descentrado”.
Sin duda serán concejales electos por el Partido Popular.
Nos despedimos ( esta vez no brazo en alto), pero antes uno de ellos, saca a hurtadillas de su cartera una pegatina que me entrega a modo de despedida.
Se lee CAFE, sobre el fondo rojigualda.
Continuo mi camino, meditabundo y muy “descentrado”.
Cuanto esfuerzo baldío, cuantas ilusiones enterradas.
Cuantos pueblos, cuantas calles, cuántas plazas, huérfanas de nuestros gritos, nuestras propuestas, nuestra poesía….
Somos los malditos. Los desterrados. Los perseguidos. Los apestados.
Una generación entera que deberá aprender y digerir la derrota.
Y a sembrar la semilla, para que en un futuro no muy lejano, una nueva generación más audaz y capaz, recoja nuestra antorcha y lleve la luz y la esperanza ahora ausentes a todos esos Pueblos, calles y Plazas.
2 comentarios:
Ánimo Alvaro, a veces hay decepciones,el camino se torna cuesta arriba, pero sin duda todo tu esfuerzo trabajo y dedicación calaran aqui o alla a unos pocos, a unos miles; pero no te quepa duda que tu trabajo no es en valde.
Ahora descansa que el trabajo por ahora esta hecho.Mañana más y con mas fuerzas.
Es mil veces mejor ser un "maldito" pero con fidelidad a los principios que un traidor con sillón de concejal derechista.
Boia chi molla!
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